En estos días que nada cambia y una pequeña corriente sutil dinamiza el
discreto sentir de las enfermeras, asistimos a una novedad. Un movimiento
lanzado el 27 de este pasado febrero, “Nursing now 2020”.
Nursing Now tal y como define el propio Consejo
Internacional de Enfermería, es una campaña mundial prevista para y hasta tres
años, 2020 y en estrecha colaboración con la Organización Mundial de la Salud.
El objetivo principal o meta es tratar de mejorar ésta, la salud en todo el mundo a través del empoderamiento de las enfermeras.
El objetivo principal o meta es tratar de mejorar ésta, la salud en todo el mundo a través del empoderamiento de las enfermeras.
Para ello prevé a través
de una serie de objetivos, posicionar a las mismas en el contexto de liderar un
movimiento global a través una serie de cambios necesarios que requieren de la
implicación de responsables políticos.Y es que los desafíos en Salud, a los que distintos países se enfrentan,
ponen en evidencia la necesidad imperiosa de un cambio de modelo adaptado a sus
necesidades. Un modelo que de respuesta y aproveche de manera adecuada y
eficiente el potencial de los efectivos enfermeras de los que dispone o en su
defecto la inversión necesaria, ya sea en efectivos, medios, desarrollo,
valoración de los resultados en investigación e innovación para garantizar la
respuesta a las necesidades en Salud en el mundo.
Muchas de las circunstancias
de análisis de partida de este movimiento inciden en el desaprovechado
potencial de las enfermeras, bien por infravaloración o subestimación de
capacidades, o simplemente por barreras y escollos basados, o más bien
encofrados, en estructuras jerárquicas, funcionales y otros credos.
Tengo la fe, hablando de credos, que prácticamente todo el contenido que
desarrolla la estrategia o movimiento #Nursingnow, subyace de alguna manera en el constructo de visión
profesional de la mayor parte de nuestro colectivo enfermero. Quiero pensarlo,
y quiero que sea así porque de no serlo, no solo estaría en la desesperanza de
ver posible un atisbo de implicación por una parte, sino también de desinterés en los
responsables políticos por otra. Y si no, y en relación con esto último, además
de analizar y juzgar ustedes mismos,
y al margen de alguna comunidad concreta, muy concreta, el panorama por el interés
del contenido que entraña este movimiento se juzga así, al menos a priori,
aunque más bien creo que es una constante desde hace ya, me atrevo a decir,
décadas, incluso me atrevería a discutir esto mismo hasta que me convencieran
con realidades…, de lo contrario.
Revisen los objetivos
a los que aspira este movimiento. No está
lejos de posicionamientos declarados en reuniones, foros y reuniones tanto
formales como informales en nuestro país y por líderes reconocidos e informales
fundamentalmente, de los que ponen cara y no llevan "apellido adherido". Aunque
bien es cierto que la estrategia es global, quiero decir mundial y en ella van
ya posicionados países quizás con perspectivas diferentes y sensibilidades
condicionadas por la necesidad de atender poblaciones extensas sin coberturas
de garantías universales. Quizás en otros países más desarrollados este
“moving”, simplemente quede en pequeños "subidones dopaminérgicos" viendo como el
citado movimiento realmente “no va con nosotros” salvo, con aquellos
oportunistas y agraciados que puedan en una de las acciones que describe la
estrategia, crear redes de conexión para sus objetivos, pero con escasa
repercusión para la salud de nuestros ciudadanos y población en general y mucho
menos para mejorar la tan necesaria reconstrucción de asuntos pendientes con
nuestra profesión.
Desarrollo profesional, regulación, condiciones de empleo, influencia y
máxima consideración en la participación de políticas y planes de salud global
y local. Más puestos de liderazgo, una red de los mismos vinculada a propósito
de dicho desarrollo etc, etc, etc…
Nursing Now basado Triple Impact,
elaborado por All-Party Parliamentary Group y publicado el 17 de octubre de 2016 argumenta que existe una necesidad
global urgente de elevar el perfil de la enfermería y permitirle trabajar con
todo su potencial si los países quieren alcanzar una cobertura universal en
salud. La enfermería puede y debe liderar estos temas pero no podrá
conseguirlo sin el apoyo de los políticos, gestores y líderes sanitarios no
enfermeros. http://cuadernillosanitario.blogspot.com.es/2016/10/el-triple-impacto-de-la-enfermeria.html
De
ahí que se considere necesaria la implicación de éstos, de todos. Asumir la
necesaria responsabilidad sobre el cambio y modelaje, de un futuro proyectado
con voluntad y compromiso tomando decisiones compensatorias y de futuro, de un
cambio sustancial hacia un modelo que de participación a las enfermeras, no solo
como protagonistas de su disciplina, gobierno, dirección, avance y desarrollo
profesional, sino también como socios de pleno derecho en las decisiones,
diseños y articulación de políticas, planes, coordinaciones y evaluaciones en,
por y para Salud.